De un tiempo para acá, mis jefes se la pasan preguntándome
por qué es que de repente me dio por andar yendo a cada rato a la casa de mis
tíos. ¡No mamen, si supieran! Jajaja todo es culpa de la puta de mi tía, ya me
había enterado que mi tío nomás no le cumplía porque había escuchado a mi papá
contarle a mi madre que al pobre nomás ya no le funcionaba, así que fijándome
un poco más, pude darme cuenta que mi tía andaba tan urgida de verga que cada
vez que me rascaba los huevos ella se relamía los labios y apretaba sus patitas
para pellizcarse la pepita, así que me le acerqué, le besé el cuello y ella
automáticamente se levantó la falda y me dio el culo la muy zorra